24h España.

24h España.

Exmilitar estadounidense enfrenta cargos por intentar aliarse con Hezbolá.

Exmilitar estadounidense enfrenta cargos por intentar aliarse con Hezbolá.

En un giro notable de los acontecimientos, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha hecho público hoy el caso de un exmilitar estadounidense, cuyo nombre es Jack Danaher Molloy, acusado de haber intentado unirse a Hezbolá, un partido-milicia chií originario del Líbano. El individuo, de 24 años, habría llevado a cabo viajes a Líbano y Siria con la intención de apoyar a esta organización designada por el gobierno estadounidense como terrorista.

Formalmente, Molloy enfrenta cargos por intentar favorecer a una organización terrorista internacional y por haber realizado declaraciones falsas a las autoridades estadounidenses en relación con actividades de terrorismo. Según el comunicado emitido, el jurado le ha imputado la intención de proporcionar apoyo material a Hezbolá, plenamente consciente de su estatus como entidad vinculada a actividades terroristas entre agosto y diciembre de 2024.

El relato presentado en la acusación detalla que, tras su llegada a Líbano en agosto, Molloy intentó afiliarse al grupo militar, aunque recibió advertencias de que no era el momento propicio para hacerlo y que debía adoptar medidas adicionales antes de consolidar su unión. Posteriormente, en octubre, viajó a Siria con el objetivo explícito de "luchar del lado de Hezbolá" en el conflicto sirio, y, tras regresar a Estados Unidos, intensificó sus esfuerzos por establecer contacto con la organización, utilizando plataformas digitales y comunicándose con individuos en el Líbano.

El documento de cargos subraya que, durante su tiempo tanto en Estados Unidos como en el extranjero, Molloy manifestó abiertamente su hostilidad hacia la comunidad judía, promoviendo actos de violencia en su contra. Esta animosidad se corroboró mediante una serie de imágenes y vídeos hallados en sus dispositivos electrónicos, así como en los nombres que eligió para sus perfiles en redes sociales y correos electrónicos.

Aparte de las acusaciones sobre su intención de unirse a Hezbolá, se alega que Molloy proporcionó información engañosa a los agentes del FBI al llegar al Aeropuerto Internacional de Pittsburgh el 20 de octubre. En ese momento, aseguró no tener planes ni intención de involucrarse con la organización. No obstante, se plantea que esta afirmación era falsa, dado que tenía la intención de establecer contacto con miembros de Hezbolá durante su viaje a Siria, donde se habría coordinado para una reunión con otros individuos afiliados al grupo.

Por su parte, Molloy, que posee doble nacionalidad estadounidense e irlandesa, fue arrestado el 6 de diciembre de 2024 en Chicago y posteriormente trasladado a Pittsburgh el 30 de diciembre. Si se le declara culpable de los cargos que enfrenta, podría recibir una condena de hasta 20 años de prisión por el apoyo material a grupos terroristas, así como ocho años adicionales por las declaraciones falsas realizadas ante las autoridades. Este caso, que destaca la complejidad de los movimientos transnacionales y las conexiones entre la proliferación de extremismos, se suma a las inquietudes sobre la seguridad y la radicalización en el contexto contemporáneo.