En una decisión que ha causado revuelo en Italia, la Fiscalía de Palermo ha solicitado seis años de prisión para el vicepresidente del Gobierno y líder de la Liga, Matteo Salvini, por su actuación en el caso de 147 migrantes rescatados por el barco 'Open Arms' en 2019 y a los que se les negó el desembarco en Lampedusa.

Los fiscales afirman que Salvini no actuó por una estrategia gubernamental, como argumenta su defensa, sino por intereses electorales basados en la retórica antiinmigración, poniendo en riesgo la vida de las personas a bordo sin justificación.

Para la Fiscalía, priorizar la soberanía del Estado sobre los Derechos Humanos no es aceptable, y han subrayado que incluso en casos de traficantes de personas o terroristas, el protocolo internacional establece la obligación de rescate en el mar.

En un juicio que duró siete horas, se ha recordado el nombre de cada uno de los 147 migrantes, resaltando que fueron los grandes ausentes en el proceso y víctimas de una decisión "criminal" por parte de Salvini al negarles un puerto seguro.

Por su parte, Salvini se ha defendido acusando a la Fiscalía de hacer política y ha denunciado que defender las fronteras de Italia no debería ser motivo de persecución, alegando que en ningún momento puso en peligro a los migrantes.

La ONG española 'Open Arms' ha celebrado la solicitud de la Fiscalía italiana como un paso importante para la justicia europea, destacando la importancia de centrarse en las personas rescatadas y en la necesidad de respetar los Derechos Humanos por encima de consideraciones políticas.